Con “Orejas de Burro” y “Pensando Hacerse Ricos en 3 años” arrivaron a Ezequiel Montes.
A partir del día de hoy, le decimos YA BASTA a la corrupción, la impunidad y la ignorancia que gobiernan al Municipio.
Se están cumpliendo ya 20 meses de la actual administración municipal encabezada por el panadero Hipólito Filiberto Martínez Arteaga, y aún los ezequielmontenses nos seguimos preguntado: ¿Hasta cuando se tendrá que seguir soportando la ignorancia, corrupción y robos de este bolillero y de su camarilla?
Parece que la instrucción desde la Capital del Estado ha sido la misma, pues desde que se dieran a conocer las “burradas” del inútil de “Polo”, y de su flamante “Cínico Municipal”, todos los habitantes, ciudadanos y vecinos de este hermoso lugar, no hemos hecho mas que soportar y aguantar las fechorías del grupo de ineptos que dirigen al municipio.
Pero, ¿Porqué no pasa nada?, ¿Porqué se siguen cometiendo injusticias sin consecuencias?, ¿Porqué transgreden la ley sin que pase mas nada?, ¿Porqué se ha estancado la economía del municipio?, ¿Porqué los funcionarios municipales estrenan autos y camionetas de lujo, mientras que todos los demás habitantes del municipio que no ocupamos cargos en la presidencia, vivimos en situaciones de escasez, o en el mejor de los casos, de estrechez económica?
Simple y sencillamente por una razón: Por que el dinero del erario público está siendo robado con el mayor descaro, o bien, en el mejor de los casos, está siendo despilfarrado en sueldos y salarios inútiles.
Bien decía hace tiempo una de las pocas personas con principios y valores del Ayuntamiento de Ezequiel Montes, y de quien preferiría omitir su nombre por afán de no involucrarlo: El costo de un kilo de tortillas actualmente es de $9 si vas por el a la tortillería; pero si mandaras a comprarlo al “Chuper Presidente Polo”, terminaría costando $100.
¿Porqué? Por que con su estilo de administración pública, tendría que repartir $10 al que toma el recado, $10 al que pasa el recado, $20 para su impecable Coordinador de Directores, $15 para realizar una reunión urgente para tomar decisiones,$10 para el cafecito y las galletas de la reunión urgente, $21 para realizar la licitación pública nacional para la compra del kilo de tortillas, $10 para un asesor que los oriente sobre que tipo de tortillas comprar, $15 mas para el flamante Coordinador de Directores por decidir a que compadre le va a comprar las tortillas, $18 para el Tesorero Municipal por los gastos de tinta y pluma necesarios para firmar el cheque, $25 para el Presidente Municipal, nada mas por ser el mero mero y para abonarle a los gastos en que incurrió en su campaña, $10 también para el Presidentito por que también él firma el cheque, $20 para la momia de la Coordinadora de Egresos por concepto de manejos contables, que en realidad no son mas que tranzas contables, por que lleva manejando la Tesorería desde hace medio siglo, y finalmente se quedan sin comprar el bendito kilo de tortillas, porque aunque la tortillería se encuentra a la vuelta de la esquina, ya no alcanza para ponerle gasolina a la camioneta, ni para pagar el sueldo de alguien que vaya por él.
No sobraría decir que este estilo de administración es, por demás, el más estúpido de todos, por que al final le terminan debiendo al Gobierno del Estado la mitad de los gastos que hicieron, y que le pidieron prestado, por que no les alcanzó con lo presupuestado, además de que el Síndico termina peleado con todos por que no “se mocharon” con el, y para que no se enoje, le ofrecen que todos los foquitos de a $1 se los van a terminar comprando en $300. (Ahhh, estimados lectores, y si tuvieron el cuidado de sumar cada una de las cantidades y al final concluyeron que su resultado no da $100, están en lo correcto! Esto se debe a que he utilizado la mística y maravillosa fórmula aritmética, que cuidadosamente han diseñado en la Tesorería Municipal de Ezequiel Montes los fabulosos Contadores Públicos con Maestría y Doctorado, egresados de la Triplemente Heroica Universidad del Virote y el Cocol de Burrolandia, de la cual es Rector nuestro bien amado Presidente Municipal, el Doctor Honoris Causa Don Hipólito Filiberto Martínez Arteaga).
Desafortunadamente, y aunque cueste creerlo, esto es lo que comúnmente ha estado sucediendo, en resumen y por analogía, durante estos 20 meses de administración verde en el Municipio de Ezequiel Montes, Querétaro.
Cada compra, cada adquisición, cada obra pública, cada servicio municipal, ha sido inflado en sus montos. Los únicos que han sido beneficiados con este sistema han sido los mandos superiores del gobierno municipal, que estrenan casas, automóviles, camionetas, joyas y amantes; y que solo en función de los beneficios que dichas obras, compras y servicios les brindan, es que autorizan su realización. Al final, es con todo esto con lo que justifican sus elevados salarios. La verdad, en este sentido, es que el bien común que se supone debiera estar garantizado para todos por disposición constitucional, se encuentra supeditado a los intereses egoístas de esa camarilla de vividores que ni gobiernan ni trabajan para el bienestar de la población.
La pregunta es: ¿Y porqué siguen tan tranquilos en las oficinas de la Presidencia Municipal, como si nada pasara? Todos en este lugar, sabemos de una o de varias equivocaciones, corruptelas, abusos de autoridad, robos, fraudes, tonterías, despilfarros, borracheras, encubrimientos, y demás atropellos a la dignidad de nosotros, los ciudadanos queretanos.
Y como dicen que para muestra basta un botón, no podríamos hacer mas que recordar al siempre impecable y pocas veces humilde Coordinador de Directores de Ezequiel Montes, quien a saber, es un advenedizo de la administración pública, quien sin tener mayor conocimiento sobre lo que es el Gobierno Municipal, se acercó y llegó a tan impune e ilustre posición a través de medios de compra y cooptación de favores, nada mas y nada menos que del mismísimo Presidente Municipal, quien le otorgó al supuesto Licenciado Mario Ezcurdia Carmona, el mando supremo sobre sus inútiles lacayos a cambio de un viaje en crucero.
Este Coordinador, lo único que en realidad organiza es a sus compadres, por lo que tal vez su nombramiento debiera de ser modificado en honorable Sesión de Cabildo por: “Coordinador de Directores y Compadres”, de cualquier manera, ni ese ni el otro puesto existen, ni en la Ley Orgánica Municipal ni en el Reglamento Interno de la Administración Pública Municipal.
Lo único que legalmente existe es la usurpación de funciones públicas de dicho servidor, pues tanto en el nombramiento, como de facto, ejerce funciones propias de otros cargos que si existen en los ordenamientos legales. Y recordemos que la usurpación de funciones es un delito castigado por la ley penal.
De cualquier manera, ya sea que a este gris personaje lo llamemos Coordinador de Coordinadores, Director de Directores, el Compadre de la Comarca, BABE el Puerquito Intransigente, el Advenedizo Jefe de Jefes, el Jefe Espurio o como quieran llamarle, su denominación no mejoraría en ningún caso su mal desempeño, aunque lo pretendan hacer por Cabildo, pues a pesar de contar con todo el mando y sin ninguna responsabilidad por afrontar, no ha sido capaz de ocultar los mas de $30,000.00 pesos que se sirve al mes por andar de enamorado paseándose por San Juan del Río en su Hummer, o la nómina de su chofer particular pagado por la presidencia, o los más de $2,000,000.00 dos millones de pesos que a través de su empresa fantasma llamada KESATEX S.A. DE C.V. ha facturado al Municipio de Ezequiel Montes, que no obstante haberse brincado toda la normatividad en materia de adquisiciones y de obra pública con ayuda de sus secuaces C.P. Julio César Fernández García de la Coordinación de Adquisiciones, C.P. Benjamín Arteaga Sánchez de la Contraloría Municipal y de la C.P. Ma. Elena Ríos Ferruzca de la Coordinación de Egresos de la Tesorería Municipal, pues ha podido introducir varias facturas presumiblemente apócrifas, es decir, falsas, como ya dijimos, por mas de $2,000,000.00 dos millones de pesos en menos de 10 meses que el angelito ha estado “sirviendo” a la población, o mejor dicho, “sirviéndose de la población”; por que si de algo podemos estar seguros es que, en cuanto la Secretaría de Hacienda y Crédito Público llegue a Ezequiel Montes para esclarecer esto, el primero en huir y en nunca mas volver a aparecerse por aquí será Mario Espurio, digo... ...Mario Ezcurdia, aunque eso si, con los bolsillos repletos de billetes.
Quien al parecer todavía esta esperando a que se le aparezca la Virgen, o que el Espíritu Santo baje a darle sus mazapanazos y a abrirle los ojos, es “Don Polo”, pues desde el principio se hizo a la idea de que gobernar no podía ser tan difícil, pues comparó el negocio de hacer dinero sirviéndose del municipio, con el negocio de hacer dinero haciendo churros y bolillos. “¿Que tan difícil puede ser gobernar un municipio, o que tan diferente de hacer una bolita de masa, darle forma, echarle tantito sudor y meterla al horno?”. Nada mas diferente a eso, Presidente Mesías de Migajón, la receta para sacar adelante al municipio ya no consiste en echar harina, levadura, azúcar, agua y sal, sino en que, por dignidad propia, salga de aquí y acepte que es un inepto e incompetente. ¿O acaso hace falta recordarle a este inepto que a su receta para hacer bolillo, siempre le van a faltar huevos?
Pero este Presidente ha dejado en tela de juicio el tener si quiera una pizca de valor para dejar de cobrar un salario exhorbitante, por hacer nada mas que contratar asesores ineptos que no saben mas que adular y cobrar su quincena.
“Somos los ciudadanos, en pleno ejercicio de nuestros derechos, quienes hacemos la verdadera democracia. Es la sociedad civil la responsable de rescatar los espacios políticos y denunciar a sus secuestradores. Por ello es importante que sepamos reconocer a los políticos que han llegado al poder a través de esperanzar a la población, y que terminan traicionándola, como Judas a Cristo, por unas cuantas monedas”.
